Violencia pro-aborto: El juez del Tribunal Supremo Samuel Alito ha sido trasladado a un lugar seguro para protegerle a él y a su familia tras la violencia proabortista del fin de semana, en medio de amenazas a los jueces y a sus familias en sus casas.
Fuente: Lifenews.com
A pesar de que los estadounidenses están a favor de anular Roe y de que 11 encuestas recientes muestran que los estadounidenses están a favor del aborto, los activistas abortistas han protagonizado actos de violencia, vandalismo y acaloradas protestas en respuesta a la filtración del borrador de la opinión del Tribunal Supremo de Estados Unidos que anula Roe contra Wade. Esperan persuadir de alguna manera a uno o más jueces del Tribunal Supremo para que cambien de opinión.
Nuevos informes muestran que la mayoría del Tribunal Supremo para anular Roe no ha cambiado a pesar de la filtración del borrador de la opinión la semana pasada y de la violencia y las protestas a favor del aborto en los días siguientes.
Violencia Pro-aborto
Mientras todo esto ocurre, Altio y su familia habrían sido trasladados a un lugar que no será revelado. La semana pasada, Alito canceló una comparecencia en la conferencia judicial del 5º Circuito de Apelaciones de Estados Unidos. Aunque no se dio ninguna razón oficial para la cancelación.
Según varios medios, activistas de extrema izquierda, incluyendo un grupo llamado Ruth Sent Us, están intentando intimidar a los cinco jueces que se espera que firmen la versión final de la opinión filtrada de Alito en el caso Dobbs v. Jackson Women’s Health Organization, que podría anular Roe y Planned Parenthood v. Casey. Los otros cuatro jueces son Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett.
Los activistas también apuntan al presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, cuyas preguntas durante el argumento oral en el caso Dobbs sugirieron que pretendía mantener la prohibición del aborto en Mississippi sin anular Roe.
El sábado, activistas pro-aborto en Virginia y Maryland se reunieron en las casas de los Roberts y Kavanaugh. Los activistas frente a la casa de Kavanaugh corearon “no retrocederemos” y realizaron piquetes con pancartas.
El analista jurídico Jonathan Turley informó que fue el vecino de Kavanaugh quien organizó la protesta en la casa del juez. La protesta comenzó en una cafetería de Chevy Chase, y luego los activistas marcharon hacia las casas de Roberts y Kavanaugh.
Según el Código de Virginia, “cualquier persona que se dedique a hacer piquetes ante o en torno a la residencia o vivienda de cualquier individuo, o que se reúna con otra u otras personas de manera que perturbe o amenace con perturbar el derecho de cualquier individuo a la tranquilidad en su hogar, será culpable de un delito menor de clase 3.”
A última hora del viernes, el juez del Tribunal Supremo Clarence Thomas tenía un mensaje para los activistas radicales del aborto que creen que pueden intimidar al Tribunal Supremo para que revise su proyecto de opinión que anula el caso Roe v. Wade: No podéis intimidarnos.
Thomas habló en la conferencia judicial del 11º Circuito en Atlanta, donde discutió por primera vez el proyecto de opinión filtrado del Tribunal Supremo.
Como sociedad, “nos estamos volviendo adictos a querer resultados particulares, y no a vivir con los resultados que no nos gustan”, dijo Thomas.
“No podemos ser una institución a la que se pueda intimidar para que nos dé sólo los resultados que queremos”. Los acontecimientos de esta semana son un síntoma de ello”, dijo Thomas, según los informes.
El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, habló en la misma conferencia el jueves, donde calificó la filtración de “absolutamente atroz”. Él también dijo que la violencia y los ataques de los activistas pro-aborto no influirían en la decisión final del Tribunal Supremo.
Los centros de embarazo pro-vida y los defensores de la vida ya han sido objeto de vandalismo, violencia y acoso esta semana en respuesta a la noticia. Al menos una iglesia católica también lo ha sido, y parece que habrá más en los próximos días. Los activistas del aborto bombardearon la oficina de un grupo provida, causando grandes daños.
Los activistas del aborto están tratando de intimidar a los jueces del Tribunal Supremo de EE.UU. para que cambien de opinión y mantengan Roe, después de que el borrador de opinión filtrado mostrara que la mayoría votaría para anular la infame sentencia de 1973. El borrador no es definitivo, los jueces pueden cambiar de opinión, y no está claro cuándo el alto tribunal emitirá su fallo definitivo sobre el caso del aborto Dobbs contra Jackson Women’s Health, pero muchos creen que el tribunal anulará Roe y permitirá que los estados vuelvan a proteger a los bebés no nacidos.
Junto con la violencia del aborto contra los bebés no nacidos, las amenazas y la violencia contra los defensores de la vida también han aumentado en los últimos años. LifeNews.com ha documentado informes de cientos de incidentes en los últimos años, incluyendo amenazas de bomba, agresiones, amenazas de muerte, incendios provocados y vandalismo.
Y es probable que la violencia de los activistas del aborto continúe mientras el Tribunal Supremo de EE.UU. se prepara para emitir su fallo final en el caso Dobbs contra Jackson Women’s Health este verano. Si el tribunal anula el caso Roe, el Instituto Guttmacher predice que 26 estados prohibirán el aborto.
Desde 1973, más de 63 millones de bebés no nacidos y cientos de madres han muerto en abortos supuestamente “seguros y legales”.
Supreme Court Justice Samuel Alito has been taken to a secure location to protect him and his family in the wake of pro-abortion violence over the weekend amid threats to justices and their families at their homes.
Although Americans are in favor of overturning Roe and 11 recent polls show Americans are pro-life on abortion, abortion activists have engaged in violence, vandalism and heated protests in response to a leaked draft opinion from the U.S. Supreme Court that overturns Roe v. Wade. They hope to somehow persuade one or more Supreme Court justices to change their mind.
New reports show the Supreme Court majority to overturn Roe has reportedly not changed despite the leak of the draft of the opinion last week and pro-abortion violence and protests in the days following.
As all this is happening, Altio and his family have reportedly been moved to a location that will not be revealed. Last week, Alito canceled an appearance at the 5th U.S. Circuit Court of Appeals’ judicial conference. Although no official reason was given for the cancellation, the move came only days after the leak.
According to multiple outlets, far-left activists, including a group called Ruth Sent Us, are attempting to intimidate the five justices who are expected to sign the final version of Alito’s leaked opinion in Dobbs v. Jackson Women’s Health Organization, which could overrule Roe and Planned Parenthood v. Casey. The other four justices include Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh, and Amy Coney Barrett.
The activists are also targeting Chief Justice John Roberts whose questions during oral argument in Dobbs suggested that he was looking to uphold Mississippi’s abortion ban without overturning Roe.
On Saturday, pro-abortion activists in Virginia and Maryland assembled at the homes of the Roberts and Kavanaugh. Activists outside Kavanaugh’s home chanted “we will not go back,” and picketed with signs.
Legal analyst Jonathan Turley reported that it was Kavanaugh’s neighbor that organized the protest at the justice’s home. The protest began at a café in Chevy Chase, then activists marched to the homes of Roberts and Kavanaugh.
According to the Code of Virginia, “Any person who shall engage in picketing before or about the residence or dwelling place of any individual, or who shall assemble with another person or persons in a manner which disrupts or threatens to disrupt any individual’s right to tranquility in his home, shall be guilty of a Class 3 misdemeanor.”
Late Friday, Supreme Court Justice Clarence Thomas had a message for the radical abortion activists who think they can bully the Supreme Court into revising its draft opinion overturning Roe v. Wade: You can’t bully us.
Thomas spoke at the 11th Circuit judicial conference in Atlanta where he discussed the Supreme Court’s leaked draft opinion for the first time.
As a society, “we are becoming addicted to wanting particular outcomes, not living with the outcomes we don’t like,” Thomas said.
“We can’t be an institution that can be bullied into giving you just the outcomes you want. The events from earlier this week are a symptom of that.,” Thomas said, according to reports.
Chief Justice John Roberts spoke at the same conference Thursday, where he called the leak “absolutely appalling.” He, too, said the violence and attacks form pro-abortion activists would not influence the Supreme Court’s final decision.
Pro-life pregnancy centers and pro-life advocates already have been the targets of vandalism, violence and harassment this week in response to the news. At least one Catholic church has, too, and more seems likely in the days ahead. Abortion activists bombed a pro-life group’s office, causing extensive damage.
Abortion activists are trying to intimidate U.S. Supreme Court justices to change their mind and uphold Roe after the leaked draft opinion showed the majority voting to overturn the infamous 1973 ruling. The draft is not final, judges can change their minds, and it is not clear when the high court will issue its final ruling on the abortion case Dobbs v. Jackson Women’s Health, but many believe the court will overturn Roe and allow states to protect unborn babies again.
Along with the violence of abortion against unborn babies, threats and violence against pro-life advocates also have increased in recent years. LifeNews.com has documented reports of hundreds of incidents in recent years, including bomb threats, assaults, death threats, arson and vandalism.
And violence by abortion activists likely will continue as the U.S. Supreme Court gets ready to issue its final ruling on Dobbs v. Jackson Women’s Health this summer. If the court overturns Roe, the Guttmacher Institute predicts that 26 states would ban abortions.
Since 1973, more than 63 million unborn babies and hundreds of mothers have died in supposedly “safe, legal” abortions.
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