larazon.es
12.09.2013
El Tribunal Constitucional se pronunciará por vez primera sobre si los farmacéuticos tienen derecho o no a la objeción de conciencia para que puedan negarse a vender la conocida como píldora del día después, la cual puede ser adquirida sin receta alguna y con la que se evita que la mujer quede embarazada al interrumpir la ovulación –impedir que los ovarios produzcan óvulos que puedan ser fertilizados–, fertilización –impedir que el óvulo sea fertilizado por el espermatozoide– o implantación –evitar que un óvulo fertilizado se adhiera a la pared del útero–.
El Alto Tribunal admitió ayer a trámite el recurso interpuesto por un farmacéutico que fue sancionado en 2008 con una multa de 3.300 euros por parte de la autoridad administrativa, por negarse a vender ese producto que, en opinión de no pocos sectores, es abortivo.
Esa sanción fue confirmada en julio de 2010 por la Dirección General de Planificación e Innovación Sanitaria de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía. El afectado recurrió esa resolución, pero fue desestimada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 13 de Sevilla, al entender su titular que la multa era ajustada a Derecho.
Ante esa decisión judicial, el farmacéutico recurrió en amparo ante el Tribunal Constitucional, al considerar que se había vulnerado su derecho a la objeción de conciencia por negarse a dispensar la citada píldora.
La sección primera del Alto Tribunal ha considerado que el recurso tiene la «especial relevancia constitucional» como para admitirlo a trámite. Es decir, hay motivos para que el TC se pronuncie sobre el fondo, es decir, sobre el derecho de objeción de conciencia de los farmacéuticos.
Para ello, y como primer paso, la Junta de Andalucía podrá personarse en el procedimiento al igual que el Ministerio Fiscal.
Posteriormente, llegará el turno para que puedan realizar las alegaciones que consideren oportunas al recurso interpuesto. El ponente del recurso, con toda esa documentación, presentará una propuesta de resolución para, finalmente, dictar sentencia, que marcará la línea que deben seguir los tribunales a partir de entonces sobre esta cuestión.
Siguen sin venderla
Por otro lado, los afectados expresaron ayer a LA RAZÓN su satisfacción por la decisión del TC y confianza en que finalmente se reconozca el derecho a la objeción de conciencia de los farmacéuticos, «ya que ello nos haría más libres». Además, destacó que volverían a actuar igual y que desde entonces no dispensan ese producto, informa J. M. del Hoyo.
