redacciónmedica.com
03.03.2014
El Consejo General de Enfermería ha elaborado un documento de reflexiones sobre el Anteproyecto de Ley Orgánica para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada en el que valora “muy positivamente” la inclusión de la regulación de la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios, incluyendo no sólo el reconocimiento legal del derecho, sino también aspectos concretos para su materialización.
Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de Enfermería.
El texto refleja que el aborto constituye “un grave dilema ético para los profesionales de Enfermería en el ejercicio de sus funciones, por lo que es indispensable que actúe de acuerdo con sus valores éticos fundamentales y manteniendo siempre el respeto por la libre decisión de la persona”. Para el Consejo General de Enfermería “la objeción de conciencia es considerada por muchos como el verdadero termómetro democrático, pues la nota común de todos los regímenes totalitarios es la prohibición de la misma, o su reconocimiento restrictivo”.
Así, la corporación que preside Máximo González Jurado, expone en el documento que “entiende y respeta todas las opiniones y opciones que cada profesional pueda manifestar de forma individual ante la regulación de la interrupción voluntaria del embarazo”. Por último, el Consejo General de Enfermería “entiende necesario el mayor consenso posible, en los ámbitos político, social y profesional, al objeto de dotar a la regulación resultante de la mayor estabilidad y seguridad jurídica”.
